Mucha gente me preguntaba por la receta de esas poderosas barritas proteicas que estoy merendando estos días. ¡Así que aquí está!
Puedo anunciar con orgullo que es mi merienda favorita absoluta para llevar, mientras viajo, como combustible de energía en el medio del día o durante el trabajo. También es un tentempié de recuperación perfecto para después de una intensa sesión deportiva. Estas barritas no sólo son muy potentes a la hora de proporcionar una energía buena y duradera, sino que también son muy saludables y están repletas de superalimentos que puedes obtener en los descuentos de buen fin.
Si quieres aumentar tu ingesta diaria de proteínas y prefieres no depender de la proteína animal, ¡esta potente barrita de proteínas está perfectamente hecha para ti! Cuando era más joven solía pensar que las proteínas sólo procedían de los animales, pero esto no es cierto. Las fuentes vegetales nos proporcionan muchas proteínas, sólo tenemos que comerlas e incluirlas en nuestra dieta.
La principal fuente de proteínas de esta barrita proviene del polvo de proteína de cáñamo. Este polvo mágico verde no sólo cautiva tus ojos, sino que contiene un montón de beneficios para la salud y lleva a tus glúteos a un viaje especial de nueces.
Proteína de cáñamo
La proteína de cáñamo en polvo está hecha de semillas de cáñamo. Las semillas de cáñamo contienen una gran cantidad de grasas omega-3 que ayudan a calmar cualquier inflamación en el cuerpo. Los aminoácidos ramificados del cáñamo, necesarios para la reparación y el crecimiento del tejido corporal magro, son extraordinarios para la recuperación después del entrenamiento. Especialmente para las personas que evitan los productos animales, las semillas de cáñamo son una gran alternativa, ya que contienen una cantidad muy alta de proteínas de calidad. La proteína y la fibra que se encuentran en el cáñamo ayudan a ralentizar la digestión, lo que a su vez evita un pico de azúcar en la sangre y, por tanto, mantiene la energía del cuerpo durante más tiempo.
Avena laminada:
La avena puede parecer pálida y aburrida y recordarte las gachas que tenías que comer cada mañana cuando eras niño. Pero podrías reconsiderar este pequeño grano, ya que muestra un enorme perfil nutricional: sólo 90 g de avena arrollada aportan 6 g de proteínas y 4 g de fibra, además de manganeso. El manganeso es un mineral que ayuda a crear enzimas responsables de la construcción de los huesos. Este cereal, rico en nutrientes, es barato y puede utilizarse -junto con las queridas gachas de avena- de muchas maneras diferentes. Como siempre digo, sólo es cuestión de variedad y creatividad la forma de utilizar los productos de la naturaleza y cada pequeña planta de este planeta puede convertirse en tu mejor amiga.
Nueces:
Me encantan las nueces. Contienen grandes cantidades de grasas omega-3. Una porción de 32g de nueces contiene más del 90% de la ingesta diaria recomendada de estos ácidos grasos. Además, las nueces son especiales porque contienen predominantemente grasas poliinsaturadas, mientras que la mayoría de los demás frutos secos suelen contener altas cantidades de grasas monoinsaturadas.
Dátiles:
Los dátiles son mágicos y contienen demasiadas vitaminas, minerales y fitonutrientes como para enumerarlos todos. (Los fitonutrientes son sustancias que se encuentran en ciertas plantas y que se cree que son beneficiosas para la salud humana y ayudan a prevenir diversas enfermedades). En general, los dátiles aumentan el bienestar general y definitivamente vale la pena comerlos con regularidad.
Canela:
¿A quién no le gusta esta maravillosa especia? La canela tiene uno de los mayores poderes antioxidantes conocidos y es una excelente fuente de vitaminas y minerales. De hecho, una cucharadita de canela molida proporciona tanta fuerza antioxidante como 250 ml de zumo de granada. Además de sus fuertes propiedades antiinflamatorias y antisépticas, la canela puede mejorar la salud digestiva. A estas alturas seguro que estás de acuerdo en que esta pequeña y dulce especia es simplemente maravillosa.
Extracto de vainilla:
El extracto de vainilla es la forma líquida de la vaina de vainilla y se utiliza tanto en la cocina como con fines médicos. Al parecer, tiene propiedades afrodisíacas y se utiliza sobre todo para aromatizar bebidas y repostería. La elevada cantidad de potasio y las trazas de minerales esenciales que contiene el extracto de vainilla ayudan a controlar la presión arterial y el ritmo cardíaco. La vainilla bourbon orgánica molida puede utilizarse como sustituto y contiene los mismos beneficios y propiedades para la salud.
Barritas de proteína potentes y energizantes
Ingredientes:
2 cucharadas de semillas de chía
75 ml de agua
130 g de copos de avena sin gluten
150g de dátiles picados (frescos si es posible)
75 g de nueces picadas
60 g de proteína de cáñamo en polvo
50g de chips de coco
35 g de semillas de sésamo
2 cucharadas de semillas de amapola
2 cucharaditas de canela molida
pizca de cardamomo
media cucharadita de sal marina de grano fino
3-4 plátanos maduros (unos 375 g)
50 ml de aceite de coco (o de oliva, nuez, girasol, etc.)
2 cucharaditas de vainilla bourbon molida / extracto de vainilla puro
2-3 cucharadas de néctar de agave
(Se hace: una bandeja para hornear completa con unas 24 barras medianas o 12 barras grandes; Tiempo de preparación 30min; Tiempo de horneado: 20-25 min)
Comience por remojar las semillas de chía en los 75 ml de agua en un bol. Remover bien y reservar.
Precalentar el horno a 180°C y poner papel de horno en una bandeja.
Combinar la avena, las nueces, las semillas de sésamo y amapola, los dátiles picados, los chips de coco, la proteína de cáñamo en polvo, la canela, el cardamomo y la sal marina en un bol grande. En otro bol, combinar los plátanos maduros, el aceite de coco, la vainilla y el néctar de agave. Triturar y mezclar con un tenedor hasta que todo esté bien combinado y los plátanos estén totalmente triturados. También puede utilizar una batidora o un robot de cocina si le resulta más cómodo. A continuación, añada la mezcla de chía preparada y combínela bien.
Vierte la mezcla de plátano sobre los ingredientes secos en el bol grande y remueve hasta que estén bien combinados. Extiende la masa con una espátula en la bandeja para hornear. La masa debe extenderse uniformemente.
Hornear durante 20-25 minutos hasta que los bordes estén dorados. Dejar enfriar por completo y luego cortar la masa en los tamaños de barra que se prefieran.
Nota: Guardar en un recipiente hermético refrigerado para una mayor duración. Las barritas también se pueden guardar en el congelador hasta un mes. Media hora después de sacarlas del congelador, las barritas pueden disfrutarse como un potente tentempié sin importar la hora del día.
Sinceramente, normalmente no puedo esperar a que la masa se enfríe del todo, ese maravilloso olor a barritas recién horneadas es demasiado seductor como para esperar demasiado para probarlas. Seguramente lo experimentarás tú mismo 😉
Cuando se enfría por completo -si aún queda algo- suelo cortar la masa en barritas de tamaño medio que caben perfectamente en un tarro grande. El tarro se puede guardar muy bien en la nevera durante un par de semanas. Para separar las barritas entre sí en el tarro suelo cortar un papel de horno del mismo tamaño que las barritas y ponerlo entre ellas, lo que queda muy bonito y decorativo también.