¿Por qué duelen las articulaciones?
El dolor en las articulaciones puede tener muchas causas diferentes. Para muchas personas, el dolor articular está causado por la artritis, un grupo de afecciones caracterizadas por la inflamación de las articulaciones.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), aproximadamente el 23% de los adultos padecen artritis. La osteoartritis (OA) es el tipo más común de artritis. Este tipo está causado por la degradación del cartílago a medida que se envejece.
Para otras personas, el dolor articular puede deberse a una lesión o infección de las articulaciones, o a otra afección, como la fibromialgia o incluso la depresión. También puede ser el resultado de una mala postura o de largos periodos de inactividad.
Las personas con artritis pueden aliviar sus síntomas, pero muchas no saben cómo. Tratar el dolor articular no siempre es tan sencillo como tomar una pastilla o hacer algunos ejercicios, pero ignorar el dolor no hará que desaparezca.
Afortunadamente, existen muchas opciones de tratamiento que puede probar. Dependiendo de la causa y la gravedad de su dolor articular, puede encontrar la combinación de tratamientos que funcione para ti.
Suplementos para mejorar el dolor
La lista de suplementos en la tienda de vitaminas son suficientes para abrumar incluso al cliente más conocedor de la salud.
Cada botella, anuncio y banner afirma que es la marca número uno para ayudar a aliviar el dolor en las articulaciones.
Pero con tantos productos compitiendo por tu atención y dinero en efectivo, ¿cómo saber cuál es el adecuado para ti? ¿Alguno de ellos se basan siquiera en la ciencia?
Glucosamina y condroitina
La glucosamina y condroitina son suplementos comunes para las articulaciones, que a menudo se toman para el dolor relacionado con la osteoartritis (OA). Por lo general, se usan juntos, aunque se pueden tomar por separado si es necesario por razones médicas, como una alergia a medicamentos.
Algunos estudios grandes han demostrado que la glucosamina y la condroitina pueden retrasar levemente la progresión de la OA cuando se usan durante al menos dos años. Algunos estudios sugieren que también pueden ayudar con el alivio del dolor, pero eso puede deberse, al menos en parte, al efecto placebo.
Si bien los resultados del estudio son mixtos, la glucosamina y la condroitina generalmente no se recomiendan en entornos clínicos. Pero si las personas los toman y sienten menos dolor, los proveedores de atención médica a menudo no se oponen, a menos que interfieran con otra receta o afección médica. “Cuando la gente pregunta, les digo: ‘No puedo darles estudios para demostrar que esto los ayudará, pero no sé si los lastimará tampoco’, dice Roberto.
Al igual que con cualquier suplemento nuevo, habla con tu médico antes de usar glucosamina y condroitina para asegurarte de que sean seguros para tu cuerpo.
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