Ya sean frescas o congeladas, no se puede negar que las fresas tienen un sabor saludable.
Por qué deberías añadir más fresas a tu dieta
Si aún no eres fanático de las fresas, deberías serlo. No solo son jugosos, veraniegos y deliciosos, también son un superalimento de buena fe. Ricas en nutrientes y llenas de antioxidantes (como la vitamina C), los beneficios de las fresas son infinitos y algunas incluso te sorprenderán. Estas puedes comerlas desde un licuado hasta unos ricos hot cakes. (¿Prevención de arrugas? ¡Sí, por favor!).
Dale un impulso a tu inmunidad
“Las fresas son una excelente fuente de vitamina C”, dice Madeleine Edwards, dietista registrada con sede en Toronto. La mayoría de los mamíferos, excepto los humanos, tienen la capacidad de producir vitamina C de forma natural, por lo que es tan importante obtener su requerimiento diario. “Una porción contiene 51,5 mg de vitamina C, aproximadamente la mitad de su requerimiento diario”, dice Edwards. “Duplique una porción a una taza y obtenga el 100 por ciento”. La vitamina C es un conocido refuerzo de la inmunidad, así como un poderoso antioxidante de acción rápida. Aquí hay otros alimentos ricos en vitamina C.
Mantén tu visión saludable
Las propiedades antioxidantes de las fresas también pueden ayudar a prevenir las cataratas, la opacidad del cristalino, que puede provocar ceguera en la vejez. Nuestros ojos requieren vitamina C para protegerlos de la exposición a los radicales libres de los fuertes rayos UV del sol, que pueden dañar la proteína en la lente. La vitamina C también juega un papel importante en el fortalecimiento de la córnea y la retina del ojo. (Aquí hay otros alimentos para comer para tener ojos sanos).
Si bien se ha descubierto que las dosis altas de vitamina C aumentan el riesgo de cataratas en mujeres mayores de 65 años, los investigadores del Instituto Karolinska en Estocolmo señalan que el riesgo se relaciona con la vitamina C obtenida de los suplementos, no con la vitamina C de las frutas y verduras.
Prevenir el cáncer
La vitamina C es uno de los antioxidantes que pueden ayudar a prevenir el cáncer, ya que un sistema inmunológico saludable es la mejor defensa del cuerpo. Un fitoquímico llamado ácido elágico, que también se encuentra en las fresas, es otro. “Se ha demostrado que el ácido elágico produce propiedades anticancerígenas como la supresión del crecimiento de células cancerosas”, dice Edwards.